
El exministro de obras públicas y transportes Mauricio Batalla le envió una indirecta muy directa.
Cada país tiene el derecho de permitir el ingreso a quienes ellos consideran amigos, al igual que cuando invitamos a alguien a nuestra casa.
Llama la atención eso sí, que una sanción a un funcionario público sea celebrada por un 95% de los costarricenses.
Algo muy malo debió haber hecho ese funcionario en su vida política para esa animadversión del pueblo.